Son los servicios extras que se le pueden ofrecer al visitante y que van más allá de lo que ellos esperan recibir.
Este tipo de detalles agregan un valor imponderable, lo convierten en una experiencia conmovedora, brindando una imagen de seguridad del emprendimiento, favoreciendo la promoción de boca en boca de un modo mucho más convincente.
El secreto será lograr cautivar al visitante, marcando el carácter y la personalidad del sitio visitado.
Jabones en los hoteles, un vasito de licor en el restaurante, empanaditas en la estancia pueden ser amenidades.
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